Disfrutar de las vacaciones o de escapadas en caravana o autocaravana significa libertad, carretera y experiencias inolvidables. Pero antes de lanzarse a la aventura, hay un trámite que todo conductor debe tener muy presente: la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Pasar esta revisión periódica no solo es una obligación legal, también es una garantía de seguridad y un requisito que influye directamente en tu seguro. En este artículo te contamos todo lo que debes saber sobre la ITV para autocaravanas y caravanas.

¿Cuándo hay que pasar la ITV de autocaravanas y caravanas?

El calendario de inspecciones no es el mismo para todas las modalidades del caravaning. En el caso de las autocaravanas, la primera ITV se pasa a los cuatro años desde la matriculación. A partir de ahí, entre los 4 y los 10 años debe realizarse cada dos, y cuando el vehículo supera la década de antigüedad, la revisión pasa a ser anual.

Las caravanas, al no llevar motor y tratarse de remolques, siguen unas reglas diferentes. Si su Masa Máxima Autorizada (MMA) es inferior a 750 kilos, no están obligadas a pasar la ITV. Sin embargo, si superan ese peso, deberán acudir por primera vez a los seis años y después cada dos.

En el caso de las furgonetas camper, el calendario depende de cómo estén homologadas. Si se registran como vehículo vivienda siguen los mismos plazos que una autocaravana, mientras que, si conservan la clasificación de furgón mixto, turismo u otro tipo, las inspecciones pueden variar en función de la antigüedad y categoría.

Cómo gestionar las aguas grises y negras de tu autocaravana de forma responsable.

¿Qué se revisa en la ITV de caravanas y autocaravanas?

Más allá de la frecuencia, lo que de verdad importa es qué comprueban los técnicos en la estación. En una caravana remolcada, la atención se centra en aspectos clave como el sistema de alumbrado (intermitentes, luces de freno o posición), el estado de los neumáticos o el correcto funcionamiento del enganche que la une al vehículo tractor.

Además, en la primera ITV de la caravana también se debe presentar un certificado de la instalación de gas, aunque en las siguientes inspecciones ya no suele revisarse.

Por otro lado, las autocaravanas, al tratarse de vehículos autopropulsados, pasan una revisión mucho más completa. Además de luces y neumáticos, se examinan los frenos, la dirección, la suspensión, las emisiones contaminantes y hasta los cristales.

También se comprueba que las reformas o accesorios añadidos, como toldos, placas solares, antenas o portabicicletas, estén correctamente homologados y anotados en la ficha técnica.

En los últimos años, además, la ITV se ha endurecido en materia medioambiental y tecnológica. Desde 2025 se exige un control más riguroso de las emisiones, y las autocaravanas matriculadas a partir de 2022 deben incorporar sistemas ADAS (asistencias a la conducción), cuya presencia y correcto funcionamiento también se revisa en la inspección.

Documentación necesaria para la ITV de autocaravanas y caravanas

Cuando vayas a pasar la ITV de tu autocaravana o caravana, no olvides llevar la documentación en regla: la ficha técnica o tarjeta ITV, el permiso de circulación y un justificante de seguro en vigor. Aunque este último dato se consulta de manera telemática en el FIVA (el fichero informativo de vehículos asegurados), conviene llevar una copia de la póliza o del último recibo para evitar problemas.

¿Qué necesitas para remolcar una caravana?

¿Cómo afecta la ITV a tu seguro de autocaravana?

Aunque a primera vista no pueda parecerlo este es uno de los puntos más importantes. Circular sin ITV, o con una inspección negativa, no solo acarrea sanciones económicas que pueden ir desde los 200 hasta los 500 euros. También puede tener consecuencias directas en tu póliza.

En caso de accidente, si tu autocaravana no tiene la ITV en regla, la aseguradora podría reducir o denegar determinadas coberturas. Especialmente si se demuestra que el siniestro estuvo relacionado con una deficiencia que debería haberse detectado en la inspección (por ejemplo, un problema de frenos). Esto puede afectar tanto a la cobertura de daños propios como a la responsabilidad civil frente a terceros.

Además, los agentes de tráfico pueden inmovilizar el vehículo en carretera si descubren que circula sin ITV, lo que complicaría todavía más tu viaje. Y a la larga, un historial de inspecciones impecables también influye en el valor de reventa: un comprador se sentirá mucho más confiado al ver que todo está al día.

Cómo afecta el peso y la carga a la seguridad de tu caravana.

Consejos para pasar la ITV sin complicaciones

La experiencia demuestra que, con una pequeña preparación, la ITV suele superarse sin problemas. Antes de acudir, revisa que todas las luces funcionen correctamente, comprueba la presión y desgaste de los neumáticos y asegúrate de que no hay fugas de líquidos. También es recomendable verificar la instalación de gas (las gomas caducan cada cuatro años) y comprobar que cualquier reforma o accesorio está homologado.

Si tienes una autocaravana de grandes dimensiones, conviene pedir cita con antelación, ya que no todas las estaciones disponen de espacio suficiente para vehículos largos o pesados. Y, por último, vacía o asegura el mobiliario interior para que la inspección pueda realizarse con comodidad.

En definitiva, la ITV para autocaravanas y caravanas puede parecer un trámite más, pero en realidad es un pilar fundamental de tu seguridad y de la validez de tu póliza. Cumplir con los plazos, mantener las instalaciones en buen estado y homologar correctamente las reformas no solo te ahorrará multas y complicaciones con tu seguro de autocaravana, también te permitirá viajar con total tranquilidad. Porque cuando la carretera es tu casa, lo mejor es asegurarse de que todo funciona como debe.

Banner seguro autocaravana

¿Tienes más dudas? ¡Déjanos tus comentarios!

Síguenos para estar al tanto de todas nuestras ofertas y promociones: